La estadounidense Serena Williams dijo el martes que “no se quedará callada” ante la muerte de hombres negros baleados por agentes de policía.
Williams escribió en Facebook que se había sentido motivada a hablar sobre el tema después de pedir a su sobrino de 18 años que la llevara en auto a una reunión. Su vehículo había pasado junto a un agente de policía, y Williams “comprobó rápidamente si estaba cumpliendo el límite de velocidad” para evitar una interacción con el agente.
Williams recordó “ese horrible vídeo de la mujer en el auto cuando un policía disparó a su novio“, en referencia a la muerte de Philando Castile, baleado por un agente de Minnesota en julio, y dijo haber temido que sus familiares sufrieran un destino similar.
La atleta también citó a Martin Luther King Jr., al decir que “llega un momento en el que el silencio es una traición“, antes de poner fin a su mensaje con la frase “No me quedaré callada“.
Williams se suma a otros deportistas de alto nivel que han hablado en contra de la injusticia social. El quarterback de los 49ers de San Francisco Colin Kaepernick comenzó a arrodillarse durante el himno nacional en los partidos de pretemporada, y deportistas profesionales, universitarios y de secundaria en todo el país han seguido su ejemplo.