San Pedro Sula. – La frase “el perro es el mejor amigo del hombre” nunca fue mejor aplicada para Alba Molina y Danny Altamirano, su mascota estuvo presente el día de su boda. Esta pareja decidió que su cachorro de nombre “Bruno” se merecía estar muy elegante como un invitado más en su casamiento.
“Bruno”, tiene ocho años de edad, justo el tiempo de su relación, por ello, decidieron que formara parte de ese día tan especial. Le pusieron un esmoquin causando risas y admiración de los invitados.
Fue en el altar de la Iglesia Inmaculado Corazón de María de la Colonia los Castaños de San Pedro Sula, donde Alba y Danny, unieron sus vidas en sacramento matrimonial. Una ceremonia emotiva que terminó justo al atardecer. La novia ingresó a la iglesia del brazo de su padre Eduardo Molina, donde la esperaba Danny con una gran sonrisa en sus labios.
Los padrinos de lazo y testigos de la boda fueron, Jonathan Reyes y Rosa Alemán, amigos incondicionales de los ahora esposos.
Al finalizar la liturgia los nuevos esposos junto a sus invitados se trasladaron hasta el salón Omoa del Hotel Copantl, el lugar perfecto para enmarcar el festejo nupcial que la pareja de enamorados había soñado, una atmósfera muy cálida y natural.
A su llegada al salón realizaron su primer baile como esposos. Minutos después Alba y Danny junto a su familia levantaron sus copas uniéndose todos los selectos invitados para brindar por la felicidad.