De nueva cuenta, la actividad procesal en el sonado caso del Instituto Hondureño de Seguridad Social (IHSS) ha sido retrasada por la no comparecencia a audiencias de los defensores privados de las personas señaladas por el Ministerio Público como miembros de la red de corrupción y lavado de activos a lo interno de ese centro asistencial.
Tal aseveración, es producto de que una vez más se suspendiese la Audiencia Preliminar por Lavado de Activos, Asociación Ilícita y Testaferrato contra el propietario de la Constructora J.C. Maradiaga, Juan Carlos Maradiaga Ortiz y el cuñado de José Ramón Bertetty Osorio, Carlos Roberto Fuentes Guerra, debido a que el apoderado legal de uno de los imputados no atendiera el llamado del Juez con Jurisdicción Nacional, que citó a las partes intervinientes para las 10:00 de la mañana de este día.
Dicha conducta, que este Ente Acusador lamenta y que ya se está haciendo habitual por parte de la defensa de los cerca de 45 procesados, sin duda, alienta la impunidad y retarda la aplicación de la justicia, en una causa criminal, en la que de manera constante, el Ministerio Público, a través de la Unidad Nacional de Apoyo Fiscal (UNAF), ha venido solicitando mayor celeridad y diligencia a los Tribunales de la República.
En el caso “Seguro Social”, cada línea de investigación judicializada, se ha venido demorando, en lo que a todas luces parece ser una práctica sistemática de hacer uso de tácticas y técnicas dilatorias, que van más allá del derecho a la legitima defensa.
En consecuencia y pese a ello, los Fiscales, Peritos e Investigadores del Ministerio Público continuarán haciendo lo propio para representar los intereses generales de la sociedad en lo que respecta al desfalco y descalabro financiero del IHSS, garantizando la correcta impartición de justicia a todos los hondureños por igual.