Andy Murray, se consagró por segunda vez, campeón del tercer Grand Slam de la temporada, el Abierto de Londres o Wimbledon, el torneo más exclusivo del mundo y que se juega sobre canchas de césped.
Murray, campeón de la temporada 2013 en esas pistas, venció en la final al canadiense Milos Raonic, por parciales de 6-4, 7-6, 7-6, para su tercer Grand Slam dentro de su historial (también ganó en Estados Unidos en el 2014).
“Quiero ver si disfruto más este torneo, con relación al anterior”, dijo Murray en medio de los aplausos en la cancha central de Wimbledon, abarrotada de gente por ver nuevamente al local salir campeón.
Para Raonic, esta era la primera final en este torneo de un jugador de su país, sabe que hizo un gran evento y que en el camino dejó a uno de los máximos favoritos, el suizo Roger Federer, al que dejó en semifinales.